1,378 total views, 1 views today
Al Bat
El juego de hoy se llama Julio Urías
Por Jesús Alberto Rubio.
Como en los grandes tiempos de Fernando Valenzuela, el juego de hoy Dodgers/Rays se llama…Julio Urías.
Un triunfo del sinaloense e ipso facto se va a los cuernos de la luna y Dodgers se acercaría a la obtención de la corona otoñal ondeando la bandera de que a la tercera es la vencida.
Julio tiene el temple-talento-herramientas y la efectividad para darle la victoria a Dodgers.
Inşallah.
Didi…
¿Y qué le parece la noticia de que los NYY se acercaron y platicaron con Didi Gregorius?
Por supuesto, más que pronto dio respuesta negativa de retornar al Bronx a partir de una realidad del todo tajante:
Considera que con Gleyber Torres y Gio Urshela, bien posicionados en el short y la esquina caliente, los NYY tienen talento para buen rato.
Y tiene razón.
Ambos son parte de esa nueva generación de NYY que para su mala fortuna no han tenido al estratega adecuado (Aaron Boone) –ya ratificado por cierto– para llevarlos de la mano a una serie mundial.
Paraqué le cuento esa historia.
Con ese “no” de Gregorius, los directivos de Anaheim ya se frotan los dedos porque desde hace días le echaron sus ojos a Didi, quien ya sabe usted acaba de entrar al mercado de agentes libres.
Pedro Meré
¿Y que le parece la noticia de que los directivos de Águilas de Mexicali despidieron como mánager a Pedro Meré?
Ocho derrotas al hilo abriendo temporada, la causa letal.
Lamentable, sí, para el orgullo de Medellín de Bravo, Veracruz… y el equipo fronterizo.
No le funcionaron las cosas y como comúnmente suele suceder: toda directiva mejor suele cortar “por lo más sano”; uno en lugar de 24, como se decía antes en el argot beisbolero.
De momento, Bronswell Patrick está al frente del equipo y ya veremos si sigue ahí o llega otro timón.
Eso de las postemporadas…
Antes de continuar, mire que excelente comentario me llegó de Carlos Quintero (arqcquintero@gmail.com), vía Momento Deportivo de República Dominicana:
Su comentario fue sobre la columna Una gran diferencia, que le compartí ayer en Al Bat que amablemente me la publica en ese sitio su editor en jefe Héctor García.
Así dice:
“No estoy de acuerdo con eso de la “postemporada”. A la Serie Mundial debe ir el campeón de cada liga, ¿y qué equipo es ese? El que tuvo mejor porcentaje de ganados y perdidos en el rol regular. Punto.
¿Por qué el mejor equipo del rol regular tendría luego que andar jugando series eliminatorias contra otros equipos?
Lo de esta temporada fue una soberana payasada, en la que más de la mitad de los equipos (incluyendo los que terminaron con menos de 0.500) pasaron a la “postemporada”.
O como en la temporada de 1976-77 de la LMP, en la que, de nueve equipos, ocho pasaron a la “postemporada”, y en una increíble injusticia, el peor de todos ellos (los Venados de Mazatlán, penúltimo lugar en el rol regular, unos siete juegos abajo de 0.500) de repente se enracharon y terminaron siendo “campeones”, eliminando incluso al campeón de la Serie del Caribe en ese momento, los Naranjeros.
Por supuesto que, en la Serie del Caribe de ese año, ante los trabucos de aquellos países se les acabó la suerte y terminaron siendo un rotundo fracaso, después de haber sido México campeón el año anterior.
¿Qué hubiera pasado este año si los Cerveceros de Milwaukee, que terminaron en penúltimo lugar de su división, dos juegos abajo de las 0.500) se hubieran enrachado hasta ganar la Serie Mundial?
¿Sería justo o lógico llamarlos “campeones del beisbol”?
Por eso, después de tantos años, ya estoy dejando de seguir el beisbol. Como ya lo dije, es pura payasada”.
Interesante, Carlos.
Arozarena
A propósito de los numeritos en postemporadas y sus grandes registros, vale la pena seguirle los pasos a Randy Arozarena que hoy impacta con su bateo investido de Tampa Bay.
Lo invito a que pueda recrearse con la lectura del artículo titulado Rompe dos marcas y empata una: