Teodoro Mariscal y Mazatlán

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Al Bat
Teodoro Mariscal y Mazatlán
Por Jesús Alberto Rubio.

Antes de darle el espacio al colega Julio Maquinay Díaz sobre el tema de los Venados de Mazatlán, del cual ya le había adelantado, debo evocar este día 29 de mayo la memoria del maestro-entrenador/mánager de los Búhos de la Universidad de Sonora, Gustavo Hodgers Rico, hoy en su aniversario de fallecimiento ocurrido en 1983 en nuestra ciudad de Hermosillo.

Lo invito a que acceda a mis FB IMÁGENES UNIVERSITARIAS y el otro dedicado a él, (El Maestro Gustavo Hodgers), donde le dedico un grato recordatorio de su trayectoria, primero como partícipe/protagonista de varios deportes y luego en la pelota profesional, para luego convertirse en uno de los grandes mentores que ha tenido en su historia la máxima casa de estudios sonorense.
En su siempre grato recuerdo.
Mazatlán
Ahora sí, vayamos con Julio, quien continúa con sus trabajos de investigación –lo que inició primero con los motes de los equipos de Obregón y luego de Culiacán–, para continuar esta vez con el representativo de Mazatlán.
Para empezar, el amigo-colega, expresó: “Hola amigo un poco de historia. Te diré que he buscado/leído y no he encontrado un mote para esta novena, pero a la vez debo destacar su rica historia y lo trascendental que ha sido para la historia del béisbol en esta región del Pacífico.
Antes de continuar, hay que decirlo: el nombre de Mazatlán viene del náhuatl, Maztl- lugar de ciervos y venados y Tlán- Abundancia.
Por igual, podría decirse lugar de venados o sitio donde abundan los venados.
A Mazatlán lo fundaron los Totorames (alcanzando sus mayores logros en petróleo, pesca, alfarería y  agricultura (maíz, frijol y chile), así como los Xiximes, (recolectores de frutos silvestres (tunas, zapotes y guamúchiles, Mesquite y miel), además de cultivar el maíz, chile, algodón y tabaco.
Tepehuanes, en su traducción del Náhuatl, quiere decir, dueño de cerros. También otra interpretación es “conquistadores o vencedor en batallas”. Y me refiero a esta historia en razón a entender un poco las raíces culturales de la ciudad y el desenvolvimiento comercial de su gente y con el pasar de su rica historia muchos años después.
Y porque abordar el tema de los Venados de Mazatlán, que conservan sus raíces históricas, hoy contaré lo siguiente de un empresario emblemático del béisbol a partir de esa ciudad.

Un gran personaje, sin duda, así como lo han sido muchos en la historia de esta ciudad.
Corría el año de 1898 –un 2 de mayo–, en una comunidad llamada El Verde, en Sinaloa, nace un niño, que por sus características zodiacales vislumbraba ser un gran y buen hombre.
Remontándonos unos cuantos años atrás, en esa época en su Sinaloa, el auge empresarial e industrial florecía fuertemente y dentro de esas crecientes empresas nace la compañía fundada en 1846 por los alemanes Enrique Melchers, Jorge Melchers: la Sociedad Melchers Hermanos Y Cía.
Es una fecha que no es fácil olvidar ya que un año después de abrir sus puertas la ciudad de Mazatlán, fue invadida por fuerzas de la marina norteamericana, como  consecuencia en la guerra en Texas.

Tal sociedad fue muy importante porque llegó a tener almacenes comerciales en las ciudades más importantes del noroeste del país y su potencial económico era tan fuerte que para el trasporte de sus mercancías contaba con sus propios barcos de carga y su injerencia e impacto no se concretaba al ramo mercantil, sino que también tuvo el control mayoritario de accionista en textiles, mineras, bancarias y fundadores de la Cervecería Pacifico.
Cuenta la historia que allá por 1900 esta empresa, fue la primera en traer lujosísimos transportes de tracción mecánica, de la marca “Pierce Arrow”, entre otras. Asimismo, era distribuidora exclusiva de “Casa Krupp” (proveía el almacenamiento bélico del ejercito Imperial Aleman y de Hitler).
Melchers, era representante también de la California Vigorit Powder Co. (productor de dinamita más grande en sus tiempos) y también fue distribuidor exclusivo de la Cerveza Alemana” Hackerbrau”.
Fue así como la ciudad de Mazatlán alcanzó su máximo apogeo en los años de 1870 a 1916.

Teodoro Mariscal
Y bien, regresando a aquel 2 de mayo de 1898, nació en la localidad El Verde, situado en el municipio de Concordia en el estado de Sinaloa, don Teodoro Mariscal, un hombre con cualidades especiales como ser paciente y a la vez constante en su visión y acciones de vida.
Fue precisamente en su época como renació –después del movimiento revolucionario que interrumpió sus prácticas y fortalece la organización de clubes de béisbol y series en 1921–, cuando fueron poco a poco surgiendo grandes aficionados y por supuesto, peloteros.
El equipo de Mazatlán competía con jugadores de Culiacán conformado con peloteros locales y algunos que llegaban de la Liga Mexicana, realizándose partidos de exhibición y con ello formándose así ya una rivalidad Mazatlán- Culiacán.
Algo sobresaliente en esta etapa fue ver cómo surgieron organizadores de la talla de Antonio Zazueta Villa “Pachuco Villa” y Enrique Peña Bátiz, ambos, apoyados por don Teodoro Mariscal de Mazatlán, quienes tuvieron la idea de formar una liga profesional que jugaran durante el invierno en la región noroeste de México.
Podemos recordar que ya teniendo dos meses de haberse firmado el final de la Segunda Guerra Mundial, en aquel verano México tuvo una breve pero intensa participación en el peor combate de la humanidad, enviando al Escuadrón 201 a pelear en Filipinas, que había sido invadida por Japón —comandado por cierto por un mazatleco, Redames Gaxiola.

Pero el noroeste mexicano ya estaba listo a decir adiós al horror de la guerra, y como muestra un botón: ese otoño comenzó la Liga de la Costa del Pacífico, antecedente de la actual Liga Mexicana de Béisbol.
Las virtudes de don Teodoro Mariscal –y su pasión por el béisbol–, lo impulsaron como el precursor de este deporte a nivel profesional, no sólo en Mazatlán, sino en el Noroeste de México a través de su trabajo/incursión en las industrias Melchers en sus recorridos por todo el país.
En 1944 se reunió con Enrique Peña Bátiz, Florencio Zaragoza, Rogelio Rodríguez, Juan Chávez Etchegoyen y Fernando Ortiz, a quienes convenció de fundar la Liga de la Costa del Pacífico. El circuito nació con apenas cuatro equipos: dos de Sinaloa, Mazatlán y Culiacán, y dos de Sonora, Guaymas y Hermosillo.
Foto de don Teodoro Mariscal en el Recinto Sagrado con sede en Monterrey: https://www.salondelafamadelbeisbolmexicano.com/inmortales-89-90
Mariscal sería el primer presidente de aquel poderoso circuito que prolongó su vida hasta 1958.

La etapa incipiente de esta liga duró 13 temporadas y desde aquel temprano 1945 estaba dispuesta a ir hacia nuevos derroteros. El 3 de noviembre, en la segunda serie, Culiacán les propina una dolorosa derrota a los mazatlecos, dando los primeros bríos al clásico.
Por algunos años los partidos se celebraron durante los fines de semana, comenzando el sábado por la tarde y el domingo con doble juego, matutino (11:00AM) y vespertino (03:00PM), en series de tres partidos.
En Mazatlán se comenzó jugando viernes, sábado y domingo y la iluminación en los Estadios llegaría hasta los años 50.
Las series dieron comienzo con gran entusiasmo el sábado 27 de octubre de 1945 visitando Mazatlán a Hermosillo y Guaymas a Culiacán; dos capitales y dos puertos de renombre. Hermosillo empató el primer juego (5-5) y perdió los dos del domingo.
En esta primera temporada de la Liga de la Costa, Venados de Mazatlán logró la corona el sábado 23 de febrero de 1946 venciendo a Ostioneros de Guaymas con marcador de 4 por 3 en el puerto sinaloense, encuentro que se fue hasta la entrada número 13. En aquel entonces quedaba campeón el equipo más ganador en el standing.

En 1960 comienza la construcción del actual estadio de Mazatlán, el que se inauguró el 6 de abril de 1962 que eventual mente llevaría el nombre de Teodoro Mariscal, en honor al hombre que hizo posible el esplendor del deporte. Mariscal llegó al Salón de la Fama en 1989, en la categoría de directivo.
Dato curioso en aquel entonces las familias Toledo y Ordaz, fueron importantes en la elaboración del proyecto. En 2017 estas dos familias se vuelven a unir en la remodelación y reconstrucción del estadio.
Y bueno amigo, como dicen por ahí, lo demás es historia. Y aunque hemos hablamos de motes, Mazatlán, y Venados de Mazatlán, no pude precisar este último a partir de cuándo se le llama así.
También, pero solo en comentarios breves, siempre en relación al equipo se le ha llamado Rojos de Mazatlán o “Manada Roja”, sin embargo, sólo lo he visto que en ciertos y muy escasos comentarios periodísticos.
En igual forma, te puedo decir que por el ejemplo en la heráldica del escudo de armas de Sinaloa (proviene de la lengua Cahita) Sina – Pitahaya y Lobola- redonda) que es ovalado y en su bordura lleva el rojo, lo cual representa la pitahaya y el color rojo de ésta. En sus bordes también, he pregunta por qué del color rojo y   me comentan que por las negociaciones y convenios que se llegaron a dar entre los Rojos de Cincinnati y Mazatlán.
Por la importancia del tema, en otro capítulo daré seguimiento a muchos otros detalles relacionados con el equipo mazatleco porque como dijo Yogi Berra, “Esto no se acaba hasta que se acaba”.