MIGUEL A. OLIVAS MORALES

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ESTRELLAS DEL BÉISBOL
Miguel Ángel Olivas Morales
Por Pedro Olivas Prieto   

Miguel Ángel Olivas Morales (29 de septiembre de 1939 – 24 de noviembre de 2017) fue un lanzador reconocido en el Béisbol de Chihuahua.
Se inició a la edad de 9 años con un equipo de su barrio en la Liga Infantil Tte. Coronel José Amézquita de los Pinales.
Uno de sus primeros equipos en infantil fue el Cruz Blanca, además de jugar también para Sitio Santo Niño y La Pasadita, este último equipo quedó invicto en 20 juegos.
Proveniente de una familia de buenos beisboleros, Miguel Olivas siguió los pasos de su hermano mayor Víctor “Kilo” Olivas que fue jugador profesional; Carlos “Milo” Olivas también escribió su nombre entre los grandes lanzadores de eventos nacionales.    
En segunda fuerza sólo jugó un partido, subiendo inmediatamente a Primera Fuerza en 1958 invitado por el Ing. Oscar Cobos a su equipo Club de Leones.
Miguel fue dueño de una seguridad asombrosa y gran determinación en el centro del diamante y con gran repertorio de venenosos lanzamientos, haciendo magnífica temporada donde estuvo a punto de lanzar un juego perfecto pues en ocho entradas y dos tercios nadie le llegó a primera y faltando un out le conectaron el único hit del juego.
Contaba con un amplio repertorio de pitcheos, pero el más destacado que acababa con los bateadores que enfrentaba era su tremenda curva llegándose a ganar el apodo de “Curvas” por su manejador Raymundo “Pispirria” Sánchez.
Además de conocerle también como “El Dorado Mayor”, apodo que se ganó por una larga trayectoria con los Dorados de Chihuahua tanto como jugador y como manejador.

“Mike” Olivas en Primera Fuerza y Torneos Nacionales
En 1959 es invitado por Fernando “Nano” Torres para el Brandy Dorado en donde Miguel se coloca en plan estelar.
Jugando en primera fuerza allá por ese mismo año se enfrentan los de Mike Olivas a la escuadra liderada por Héctor “El Niño” Espino en donde el manejador decide sentar a Olivas y enfrentar a este temible bateador con un pitcher más experimentado.
El primer turno al bate, Espino conecta tremendo cuadrangular característico de él.
Para luego venir Mike en labor de relevo y enfrentar al niño Espino el cual lo domina con un elevado.
Dejando en claro que tenía los nervios de acero y una tranquilidad a la hora de enfrentar hasta a los más poderosos bateadores.
Para 1960 pasa al Refaccionaria Ramón donde apoyados por los lanzamientos de Mike Olivas quedan campeones en primera fuerza y es seleccionado para el Torneo Estatal, iniciando su primer juego contra el magnífico equipo de Casas Grandes sosteniendo un gran duelo con el As de ese equipo Carlos “Chiquis” Cobos triunfando Miguel en 11 entradas por un marcador de 1 a 0, consumando además un triple play vía Olivas a Mauro Álvarez-Chencho de la O.
A la siguiente semana se enfrenta a Parral y pierde un gran duelo contra Chava Ramos en un marcador de 4 carreras a 3 en 13 emocionantes entradas, colgando 11 ceros perdiendo en la 13a, por lo que en el curso de una semana colocó 22 ceros seguidos.
Esta actuación lo hizo acreedor de asistir al Nacional de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
En 1961 repite con Refaccionaria Ramón donde quedan campeones en años consecutivos y es seleccionado para formar parte de los Dorados de Chihuahua en el Estatal.
Ese mismo año se enfrentan los Dorados en el Manuel L. Almanza de la deportiva a la poderosa escuadra de Café Combate de Hermosillo, que era campeona del norte de Sonora.
La única carrera que timbró Hermosillo fue en la segunda entrada por un error de Samuel Rodríguez que cubría la tercera base.
La pizarra quedó 2 a 1 a favor de los Dorados quienes colgaron ocho ceros para cada uno de los bandos, un magnífico partido donde los umpires fueron bastante abucheados.
En el Estatal blanquea en juegos mañaneros a Manzaneros de Cuauhtémoc, Algodoneros de Delicias y Parral.
Pierde un duelo con el “Coco” Torres coronándose Indios de Ciudad Juárez, el cual lo selecciona para el Pre-Nacional en Monterrey en donde le ganó a La Laguna.
Para el año de 1963 Miguel inicia en primera fuerza con el equipo Recursos Hidráulicos que se cuela hasta la semifinal y se enfrentan a los campeones de ese año; Minerales de Chihuahua.
En tremendo duelo de pitcheo por parte de ambas escuadras pierde Recursos Hidráulicos por score de 2 carreras contra 1 en 11 entradas, donde Miguel Olivas lanza juego completo y sólo permite una carrera limpia ponchando a 5, aunque llevándose el descalabro.
Luego, en la Preselección Chihuahua Mike pierde un juego amistoso contra Zona Norte quien traía al serpentinero de 18 años Juan Palafox, tremendo pitcher que formó parte de aquella selección de Chihuahua en 1966 que quedaron campeones a nivel nacional con 72 entradas consecutivas sin permitir carrera.
En el Campeonato Estatal de Béisbol de Primera Fuerza de ese año jugando para los Dorados le ganan la serie a Nuevo Casas Grandes apoyados por el bateo de Luis “Güero” Mendoza para luego enfrentarse a Parral donde Cuco Torres con el bate y Raymundo Durán Avena desde la lomita consiguen ganar la serie.
Ese mismo año de 1963 Delicias es Campeón Estatal y escogen a Miguel para el Pre-Nacional efectuado en Monterrey en donde vence a Coahuila.
Ese año Miguel establece un récord que quizá no se haya igualado en el Pre-Nacional al ponchar a 11 bateadores de manera consecutiva ante Aguascalientes.
Va al Nacional en Oaxaca y le toca iniciar el primer juego en el debut de Chihuahua contra Sonora el cual ganó 8 carreras por 4, pichando Miguel labor de 8 entradas completas.
Pierde un duelo contra Luis “Viejito” García de Baja California, quien ya había representado a México en torneos mundiales.
En 1964 los Dorados son Campeones Regionales al mando de “Molinero” Montes de Oca, en el Estatal Miguel gana a Ciudad Juárez y al gran novato Rafael “Zurdo” García y en la serie por la corona vence a Delicias en su casa. Va al Pre-Nacional de Tijuana. De 1965 a 1969 continúa su tremenda carrera en Primera Fuerza jugando para diferentes equipos llevando a Chihuahua dos veces al campeonato.
Por tres temporadas jugó con Ávalos y en el último fue manejador del equipo el Kilowatito.

 Años 70’s y su carrera como veterano.
Para 1970 empezó luciendo y demostrando un Miguel Olivas como lo fuera a principios de la década pasada continuando así su brillante carrera en primera fuerza donde jugó con La Fama de Octavio Cano.
Es seleccionado a los Dorados de Chihuahua en el Estatal donde en un juego contra Juárez en el Almanza viene Miguel en labor de relevo en la segunda entrada perdiendo los de Chihuahua 2 carreras a 1, Mike se pone en un plan estelar y sólo permite una carrera a los Juarenses donde es apoyado con un racimo de 6 carreras por parte de los suyos para llevarse el triunfo con un marcador de 9-3.
En 1971 le gana a Enrique “Pelón” Licon en un duelazo por el Campeonato Estatal, en 1972 debutó con Deportes Pacala, en 1973 con Nombre de Dios y en 1974 con Avalos, año en el que quedaron campeones.
Ese mismo año del 74 juega su último estatal con los Dorados de Chihuahua. En 1977 manejando él y José Maldonado al Mercado Eléctrico lograron una hazaña en la historia del Béisbol Chihuahuense al ganar tres juegos en un solo día, debido a que el liderato quedó empatado con UACH, Avalos y ellos. En eliminatoria sencilla ganaron a la UACH de Carlos Duarte, campeón de la primera parte del torneo, y en seguida, por el campeonato de segunda parte a Avalos de Juan Manuel “Sota” Venegas y Ernesto “Pinillo” Salgado. Esa misma tarde comenzó la final a dos de tres y ganaron de nuevo a UACH, jornada agotadora que concluyó al día siguiente con victoria en forma sensacional con un marcador 2-1 en diez entradas.
También donde quedó para la historia un triple play donde línea por parte de Manuel Torres rebota en el guante de Miguel Olivas que recupera con la derecha, tiró a Domínguez en primera y este a Mauro Álvarez en segunda consumando esta bella jugada.
Ese mismo año dirige a los Dorados de Chihuahua en el Estatal y repite en 1981.
Se retira en 1982 de Primera Fuerza y se dedica a lanzar y dirigir el Club Santo Niño 40-60 de Veteranos.
En 1998 jugando con los veteranos del Santo Niño va a Los Ángeles, Ca., a participar en juegos de exhibición donde aun con el portentoso brazo que tenía “Mike” dejaba abanicando a muchos experimentados peloteros.
En años posteriores continúa su labor de lanzador y entrenador para el Santo Niño contando con un brazo imparable, jugando también en juegos de estrellas en la Liga de Veteranos donde se le podía ver aun el control característico de él, una curva poderosa y realizar jugadas de rutina. Además de continuar su carrera en el Softbol donde “Mike” aun tenía mucho que dar desde la lomita y un bateo muy oportuno.
El cronista Humberto Payan Franco, escribió de Olivas:
“Fue el excelente pitcher que todo el mundo había pronosticado, dueño de nervios de acero, una velocidad magnífica y una serie de curvas que dominaban a los bateadores más pintados.

Inducción al Salón de la Fama del Deporte Chihuahuense.
Miguel Olivas Morales, óptimo nivel de excelencia en el Béisbol y Softbol de Chihuahua es electo al Salón de la Fama del Deporte Chihuahuense en 1994.

Legado Durante su trayectoria.
“Mike” ha sido homenajeado en varias ocasiones a lo largo de su carrera desde su barrio Santo Niño por su ejemplar desempeño no sólo en el Béisbol sino también en el Softbol donde se destacó como tremendo pitcher y excelente bateador.
Además de contribuir ampliamente a la Sociedad a través del Club Deportivo y Social Santo Niño donde apoyó ampliamente el deporte local manejando equipos de Béisbol y Sóftbol, además de organizar la tradicional carrera Santo Niño ruta Manolo Nevárez.
Espero sus amables comentarios en: olivasprieto@gmail.com