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ESTRELLAS DEL BÉISBOL 
NOVATOS DEL AÑO EN 1968
Por Héctor Barrios Fernández

Seguimos con la Serie de: “Novatos del Año de la Década de los 1960s.”
Por supuesto no es una regla que, por obtener tal distinción, se asegura una carrera exitosa o lo contrario.
Verá a continuación qué clase de novatos.
Conforme la temporada de 1968 se acercaba a su fin, había poca duda sobre quién se llevaría el título de Novato del Año.
Con record de 17-12 y un magnífico 2.05 en carreras limpias permitidas, que se complementaron con 10 juegos completos, 162 ponches recetados y solamente 216 hits permitidos en 267 innings lanzados, el nativo de Iowa, Stan Bahnsen era la clara selección para tal honor.
El record de Bahnsen al siguiente año fue de 9-16, reflejó los problemas que experimentó su equipo los Yankees de New York que terminaron con promedio abajo de .500.
Pero Stan volvió para las temporadas de 1970, 1971 y 1972, esta última con los Medias Blancas de Chicago.
Ese año tuvo record de 21-16 con 3.60 en carreras limpias admitidas y ponchó el doble de bateadores que de bases por bolas otorgadas.
Sin embargo, la campaña de 1973, fue la más difícil para Bahnsen cuando se unió a luminarias del béisbol como Walter Johnson y Steve Carlton, lanzadores que ganaron 20 juegos y perdieron 20 a la siguiente temporada, solamente que Bahnsen en ese 1973 ganó 18 juegos y eso hizo que las noticias no fueran tan malas.
En total, Stan lanzó para seis equipos de Grandes Ligas en 16 años.
Lo más cerca que estuvo de lanzar en una post temporada, fue en la acortada por la huelga en 1981, cuando fue parte del cuerpo de relevistas de los Expos de Montreal.

Para muchos jóvenes que solamente vieron en la televisión a Johnny Bench en días posteriores a su época de jugador, se trata solamente de la persona que anuncia pintura en aerosol.
Para muchos otros, sobre todo para los que lo vimos jugar con los Rojos de Cincinnati en el curso de 17 temporadas, siempre será conocido como uno de los mejores receptores del béisbol.
Bench entró a la escena de las Ligas Mayores a finales de la temporada de 1967.
A Johnny le fue mal en el plato ese año, bateando un miserable .163 y se ponchó en 19 ocasiones.
Pero él era el futuro receptor de los Rojos y en su temporada de novato en 1968, recompensó la confianza de la oficina de los Rojos al batear para .275 y empujar 82 carreras.
También conectó 15 cuadrangulares y sus 40 dobletes demostraron que su poder no era cualquier cosa.
La Asociación de Escritores de Béisbol, lo nombró Novato del Año para 1968, convirtiéndose en el tercer pelotero de los Rojos en seis años en ganar esa distinción.
La temporada de novato de Johnny preparó el terreno para lo que se convertiría en una carrera que lo llevaría al Salón de la Fama del Béisbol: Cerca de 1400 carreras producidas, 389 cuadrangulares, la mayoría jugando en la receptoría, dos veces líder de la Liga Nacional en cuadrangulares y tres veces líder en carreras producidas, jugador más valioso en 1970 y 1972, dos anillos de Serie Mundial, al ganar con su equipo en 1975 y 1976.
El brazo derecho de Johnny Bench fue legendario y su habilidad para poner fuera a los corredores en las bases fue uno de los más impresionantes de todos los tiempos.
Este talento, combinado con su habilidad para ahogar las pelotas en la tierra, conducir el juego, manejar a sus lanzadores y batear la pelota, dio lugar a mediados de los 1970s, para determinar que Johnny, fue el mejor receptor de su época y uno de los mejores de todos los tiempos.
Fue nombrado junto con Carl Yastrzemski al Salón de la Fama en 1989. Yastrzamski, líder indiscutible de los Medias Rojas de Boston, equipo al que los Rojos de Bench sobrevivieron en la emocionante Serie Mundial de 1975. Muchas veces en el “Jack Murphy” vi jugar a Johnny Bench y a sus Rojos y créame, tienen razón los cronistas; sí era muy bueno.
Espero sus amables comentarios en: info@beisboldelosbarrios.com