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ESTRELLAS DEL BÉISBOL
EVOLUCIONES PARTE 11
Por Héctor Barrios Fernández
ESTRATEGIAS:
¿Tocar la pelota o no tocar? Los manejadores han usado muchos métodos para encontrar el éxito en el campo.
LA ERA DE LA PELOTA MUERTA: 1900s-1910s.
En los primeros días del béisbol, los home runs eran cosa rara de verse. Una de las razones era que las pelotas eran raramente sacadas del juego y con solamente una se podía jugar todo uno completo.
En la llamada Era de la pelota muerta, los manejadores tenían que “fabricar” carreras tocando la pelota para avanzar al corredor y haciendo uso de la jugada del robo de base. Después en 1919, Babe Ruth se destapó con 29 home runs, enseñando el valor de los bateadores de poder. Los jugadores se animaron a hacer sus “swings” para buscar las bardas y la producción de cuadrangulares comenzó a aparecer.
LA ERA DE LA PELOTA VIVA: 1940s.
Puesto que es más fácil para los bateadores conectar una pelota que está rompiendo hacia ellos, los bateadores derechos tendieron a tener más éxito frente a los lanzadores zurdos. Y los bateadores zurdos a hacerlo mejor frente a lanzadores derechos. En la década de los 1940s, el manejador de los Yankees de New York, Casey Stangel popularizó la estrategia de cambiar la alineación dependiendo del lanzador contrario. Básicamente tenía dos grupos de bateadores o “pelotones.”
El grupo de bateadores derechos jugaba contra los lanzadores zurdos y cuando un lanzador derecho estaba en la loma, mandaba bateadores zurdos. Pero Stangel quería a jugadores como Yogi Berra en la alineación, sin importar quién estuviera en el montículo. Una de las mejores parejas de jugadores que Casey alternó en primera base en 1956, fueron Moose Skowron y Joe Collins, entre los dos se combinaron para conectar 30 home runs y producir 133 carreras y los Yankees ganaron la Serie Mundial.
EARL EN EL DUGOUT 1960s.
En 1968, los Orioles de Baltimore contrataron a Earl Weaver como su manejador. Weaver tenía un plan simple de juego: Confiar en sus lanzadores y conectar home runs. Earl realmente odiaba los toques de sacrificio y las bases robadas, porque constituían un riesgo de ser puesto out. Con ases como Jim Palmer entre los lanzadores y Boog Powell entre los bateadores, el equipo de Weaver llegó a los playoff cinco veces entre 1969 y 1974.
Weaver también fue uno de los primeros manejadores en hacer las decisiones de la alineación basado en cómo un bateador salió contra un lanzador en el pasado, a menudo dejaba a Powell en la banca si él suponía que iba a enfrentar a un lanzador contra el que hubiera batallado la vez anterior.
WHITEYBALL EN LOS 1970s Y 1980s.
En 1977, 10 de los 26 estadios en las Ligas Mayores, tuvieron pasto artificial y muchos tenían espaciosos outfields. Algunos equipos adoptaron la estrategia de usar jugadores rápidos quienes podían rebotar la pelota en la dura superficie del pasto artificial y vencer el tiro a primera. El manejador Whitey Herzog ganó tres títulos de división con los Royals de Kansas City a finales de los 1970s, con alineaciones llenas de velocidad en donde el poder escaseaba, pero sus Cardenales de San Luis de 1982, fue la última escuadra tipo Whiteyball. Los Cardenales conectaron solamente 67 cuadrangulares en la temporada, eso es tres menos de los que conectó solito Mark McGwire en 1998, pero ellos se robaron 200 bases, 35 más que ningún otro equipo en la liga. Liderados por el novato Willie McGee, los Cardenales batieron a los de bateo poderoso Cerveceros de Milwaukee en la Serie Mundial. (en esos años los Cerveceros pertenecían a la Liga Americana).
MONEYBALL.
Con el aumento de los salarios en los 2000s, los equipos que no podían darse el lujo de pagar a los superestrellas, tuvieron que encontrar otras formas de ser competitivos.
Los Atléticos de Oakland fueron muy conocidos por esta estrategia, su tipo o marca de béisbol fue conocida como “Moneyball.”
Puesto que ellos no podían gastar como sus enemigos, trataron de ser más listos que ellos. Los Atléticos fueron los primeros en usar un avanzado sistema de análisis de estadísticas para hacer decisiones personales y de conjunto acerca del juego. Por ejemplo, la filosofía de “Moneyball,” no alentaba la jugada de toque de pelota, porque los análisis al respecto arrojaban que no era de suficiente beneficio. El cambio en esa dirección por el uso del análisis de estadísticas, ha cambiado la manera en la cual muchos equipos están siendo manejados. Por eso muchos aficionados que como su servidor crecimos viendo que la pelota se debería tocar en las últimas entradas para avanzar a un corredor con el score cerrado y hoy no se hace, nos jalamos los pocos cabellos de la cabeza por no entender, pero eso es lo moderno basado en análisis científico. Nos guste o no, entendamos o no.
También en el pasado, el puesto de gerente en los equipos estaba ocupado por ex jugadores o coaches. Ahora está ocupado mayormente por universitarios graduados en negocios o leyes. Recuerdo haber leído o escuchado que los Astros de Houston, equipo que hace unos años no daba una, contrató a un grupo de matemáticos para hacer tales estudios y comparaciones analíticas, hoy es un equipo exitoso. ¿Será? Le digo, la evolución en todo está.
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