SERIE MUNDIAL 1969

 3,405 total views,  2 views today

ESTRELLAS DEL BÉISBOL
SERIE MUNDIAL 1969
Por Héctor Barrios Fernández

La primera Serie Mundial de la que tuve conocimiento fue la de 1968, alguien escuchaba el juego del día en el radio, al pasar por allí me llamó la atención, me detuve y de ahí para adelante.
Ya estaba enterado que Denny McClain había ganado 31 juegos esa temporada, que Juan Marichal y su pierna en todo lo alto a la hora de lanzar había tenido una gran temporada con los Gigantes, comencé a escuchar los nombres de Bob Gibson, Tim McCarver, Julián Javier, Orlando Cepeda, Curt Flood, Red Schoendienst, Mike Lolich, Jim Northrup y otros.
Serie emocionante ganada por los Tigres de Detroit, cuando yo simpatizaba con los Cardenales.
En esos días me entero que los Cardenales habían ganado a los Medias Rojas el año anterior (1967).
La Serie Mundial de 1969 se cocina aparte y no sólo de la de 1968, sino de todas las demás.
No porque fueran los Mets de New York uno de los dos equipos participantes, sino porque ese equipo nunca había terminado más arriba del noveno lugar desde su nacimiento en 1962 y para la temporada de 1969 casi nadie esperaba de ellos algo mejor que eso.
Pero llegaron Gil Hodges y pandilla y realizaron lo impensable, ganaron el título de la División Este de la Liga Nacional que por primera vez en la historia se jugó con División del Este y del Oeste en ambas ligas.
Los Mets jugaron para promedio de .760 (38-12) en sus últimos 50 juegos, sobrepasando a los Cachorros de Chicago de Billy Williams y Ron Santo, ganando la División Este de la Nacional con ventaja de 8 juegos.

Después en serie de play off a ganar 3 de un máximo de 5 juegos, barrieron en 3 juegos seguidos a los Bravos de Atlanta con todo y Hank Aaron.
Hasta aquí mucha gente se preguntaba si el mundo se había vuelto loco o algo peor, cómo que los Mets habían llegado hasta este punto.
Semanas antes habíamos visto en la televisión cómo el hombre llegó a la luna.
Se habían llevado a cabo los conciertos en Woodstock, en el que se congregaron casi 500 000 asistentes.
Los Orioles habían ganado 109 juegos para coronarse en la Liga Americana y fue considerado como la mejor temporada por equipo alguno desde los Yankees de 1961.
Los Orioles se llevaron el primer juego de la Serie Mundial por score de 4-1, Mike Cuéllar sobre Tom Seaver.
Parecía que todo volvía a la normalidad, pero para el segundo juego Jerry Koosman hacía acto de aparición, tal y como lo había hecho Mike Lolich con los Tigres un año antes.
Jerry lanzó un gran juego y ganó 2-1 empatando la serie.
Después Tommie Agee personalmente se haría cargo del tercero.
Los Mets estaban destinados al título, sólo que no lo sabíamos.  
Tommie abrió el juego con un cuadrangular sobre Jim Palmer, fue la quinta vez en el año que Tommy abría un juego con home run.
Después en el cuarto inning, él mismo hizo una atrapada de escándalo, corriendo hasta la marca de 396 pies en la barda del jardín izquierdo-central del estadio Shea de New York y a guante volteado se quedó con la pelota para una jugada increíble, robándole un triple al ex Charro de Jalisco Elrod Hendricks.

No conforme con eso en el séptimo se lanzó un clavado entre jardín derecho y central para quedarse con una línea salida del bat de Paul Blair, lo cual salvó de 3 carreras a su equipo, ya que había dos outs en la entrada.
Agee solito hizo la diferencia de seis carreras en ese juego.
Pero Tommy Agee no fue la única estrella defensiva en esa serie.
En el noveno inning del juego 4, con los Mets ganando 1-0, Frank Robinson y Boog Powell batearon sencillos contra Tom Seaver, entonces Brooks Robinson sacó un cohete al derecho que podía haber dado a Baltimore la ventaja, pero Ron Swoboda poco conocido por sus habilidades fildeadoras, se tiró un clavado para milagrosamente quedarse con la pelota.
En elevado de sacrificio, Frank Robinson anotó de cualquier manera, pero Swoboda había salvado de una carrera a su equipo.
En el décimo inning los Mets anotaron la carrera del gane en una controversial jugada, ya que el pitcher de los Orioles Pete Richert, en su tiro a primera golpeó a J. C. Martin que corría hacia la base y el corredor emergente Rod Gaspar, como galgo anotó desde segunda.
Home runs del jugador más valioso de la serie Don Clendenon su tercero y otro del débil bateador Al Weis, también su tercero pero en el año, superaron una ventaja de los Orioles en el quinto juego, con el pobre fildeo de Powell y el mismo pitcher Eddie Watt, más dobles de Cleon Jones y Swoboda, completaron el milagro de los Mets. Por los Mets hubo atrapadas sensacionales, batazos oportunos, errores de los Orioles, pero el pitcheo de los Metropolitanos fue excelente.
Los Orioles batearon .146 como equipo, Brooks Robinson se fue 1 de 19 en la serie, Frank Robinson bateó sólo .188 y el poderoso Powell no tuvo hits de extra base en toda la serie.
Tal vez todo esto no debería haber sorprendido a nadie, ese año muchas cosas interesantes habían ocurrido.
Espero sus amables comentarios en: info@beisboldelosbarrios.com