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ESTRELLAS DEL BÉISBOL
AMADO PERALTA NÚÑEZ
Por Héctor Barrios Fernández
Vio la primera luz en la ciudad y puerto de Ensenada, B.C., el 1 de abril de 1965.
Hijo del Sr. Amado Peralta Espinoza y de la Sra. Amparo Núñez Macías.
Fueron siete hijos los del matrimonio Peralta Núñez, seis hombres y una mujer, siendo Amado Jr. el mayor de todos.
Recuerda la infancia como una bonita etapa de su vida al lado de sus padres y hermanos con viajes contantes a la tranquilidad del campo, en especial a los balnearios de San Carlos, al sur de Ensenada.
Su inquietud por los deportes y con la ayuda y atención de su señor padre, fue lo que lo orientó y motivó a iniciarse en la actividad del béisbol.
A la edad de siete años se incorpora al equipo “Potros” del Sr. Amado Peralta,
cabe destacar que el equipo “Potros” ya tenía larga trayectoria en categorías de segunda y primera fuerza en el béisbol ensenadense.
En este momento decide renovarse y reiniciar en las categorías infantiles.
Después de participar en categoría infantil, por la edad de los participantes, ascienden a la categoría “Ponny.”
En aquellos años, los terrenos en los que se desarrollaban los juegos entre otros eran el campo “Revolución” ahora “Manuel “Cepillo” Salgado para uso exclusivo del softbol, Sullivan, ahora “Daniel Garibay,” Chapultepec y otros.
Entre sus compañeros de categorías infantiles y juveniles estaban peloteritos como José L. Curiel, José “Caballito” Ochoa, Aaron Moreno, César Morales, “Pato” Ceseña, Hank Medina, Marco A. Amador, su hermano Alfredo Peralta, Adolfo Venegas, Sergio Vizcarra, Francisco Chico Rogoff, Adrián Manjarrez y otros que de momento no recuerda.
Guiados por su papá y basándose en técnicas empleadas por los Dodgers de Los Angeles, desde un principio tenían sesiones de entrenamiento serias y de alto nivel.
Otros equipos con los que competían eran “Cometas,” “Rey Sol,” “Yaquis” de Ramiro Olivares, “Paperos.”
Después de la categoría “Ponny,” saltan a nivel juvenil, pero como no había otros equipos de esta categoría, los inscriben en el nivel de segunda fuerza.
Participando en esta categoría, en 1980 a la edad de 15 años, fue Armando “Burro” Domínguez, Presidente de la Liga Municipal de Ensenada quien le hizo la invitación para que se incorporara a la selección de primera fuerza que en esos momentos participaba en el torneo estatal.
Al final teniendo muy buen desempeño en su posición de las paradas cortas, al lado de peloteros ya consagrados en el béisbol amateur bajacaliforniano.
Entre otros fue compañero de Narciso Verdugo, Marco A. Amao, Tony Pinedo, Carlos Martínez y el manejador Arturo “Cachi” Angulo.
Al año siguiente lo encontramos debutando en la categoría de primera fuerza con el equipo Materiales Ensenada, “Mesa” con Ricardo Valdez como manejador, con peloteros como Robertón García, David Pérez, Francisco Becerra, todos muy buenos jugadores.
En su paso por el béisbol aficionado local, otro de sus equipos fue “Microbuses Amarillos.”
Al año siguiente participando en su segundo torneo estatal y defendiendo el short stop de su selección, fue el Sr. Ramón “Guaymas” Inzunza quien lo recomendó con el famoso buscador Mike Brito para que lo evaluara.
Con su desempeño en el campo, Amado convenció a Brito quien mostró su interés de firmarlo para los Dodgers de Los Angeles.
Mike lo invita a la Liga Mike Brito en Los Angeles en 1981, incorporándolo a la selección de su liga.
Como fue el año de la huelga en Grandes Ligas, tuvo la oportunidad de participar en algunos juegos al lado de Fernando Valenzuela, Pepe Frías y Pedro Guerrero, jugadores consagrados en Grandes Ligas.
Posteriormente es enviado a la academia de béisbol en Pastejé, estado de México y hace su debut en la Liga Mexicana de Verano incorporándose a los Sultanes de Monterrey en 1983.
Debido a que el tercera base de Sultanes era el experimentado Joel Serna, al novato Amado el manejador Mario “Toche” Pelaez lo ubica en la primera base.
Siendo que no contaba con un guante para esa posición, recuerda con agrado que el gran Héctor Espino “el Maistro” le prestó el suyo.
A la temporada siguiente junto con Homar Rojas, es cambiado a los Tigres.
En el invierno de 1983 por corto tiempo se incorpora a los Naranjeros de Hermosillo con Mario Mendoza de manejador.
Termina esa temporada con los Delfines de Puerto Vallarta que tenía convenio de trabajo con Naranjeros.
Su actuación con los Naranjeros la culmina en la temporada 1989-90 ganando el título de la liga y participando en la Serie del Caribe en Miami.
Después de casi cinco temporadas con los Tigres, es enviado a Tuneros de San Luis Potosí en donde permaneció hasta 1990 teniendo muy buenas campañas.
Para 1991 lo encontramos enfundado en la casaca de los Saraperos de Saltillo con quienes ese año tiene la mejor temporada de su carrera en cuanto a promedio de bateo, dándole a la pelota para .339 de porcentaje.
En 1993 defiende los colores de los Petroleros de Minatitlán.
Al año siguiente (1994) comienza con el equipo Petrolero y termina con Leones de Yucatán.
La temporada de 1995 comienza con los Leones y termina con los Charros de Jalisco.
Es en la organización tapatía en donde Amado coincide con Rich Rentería quien fuera excelente bateador en Grandes Ligas y manejara a los Medias Blancas de Chicago.
Es en Jalisco en donde nace una buena amistad entre los dos, tanto así que cuando Rentería jugaba la tercera base de los Charros y Amado la primera, éste le prestaba su guante para la “esquina caliente.”
Cuando Rentería fue llamado por los Marlins de la Florida para reanudar su carrera en Ligas Mayores, “olvidó” regresar el guante de Amado y lo siguió usando en Grandes Ligas.
Años más tarde coincidiendo en Los Angeles, Rentería no solamente devolvió el famoso guante, sino que regaló a Amado uno nuevecito último modelo.
Amado Peralta regresa en 1996 a Yucatán y termina la campaña con Saltillo en donde sufre una seria lesión que prácticamente termina su carrera de jugador activo.
Después de pequeñas participaciones en la Liga del Noroeste, Liga del Bajío y Liga de Nicaragua, se retira definitivamente del béisbol como jugador activo.
Iniciando una carrera como instructor y buscador, sirviendo a varios equipos incluyendo la dirección de Marineros de Ensenada su ciudad natal, organización de la que guarda muy buenos recuerdos, también se hizo cargo de Freseros de San Quintín de la misma Liga Norte de México.
Hasta el día de hoy se desempeña a nivel universitario con la Universidad de Coahuila.
Amado Peralta Núñez orgullo del béisbol ensenadense y bajacaliforniano.
Espero sus amables comentarios en: info@beisboldelosbarrios.com