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FERNANDO VALENZUELA: UN TORO EN LOS DIAMANTES
Por CESÁREO SUÁREZ NARANJO
CAPÍTULO VEINTISIETE

PRÓLOGO: Decíamos – al terminar nuestro capítulo anterior – que “EL TORO”, a la hora de pararse en el plato y enfrentar a los pitchers rivales, “no estuvo del todo mal”. Todo lo contrario. Incluso su habilidad bateadora permitió a algunos de sus managers utilizarlo a veces como bateador emergente.
En fin, que en ese aspecto apareció en un total de 474 juegos, con 936 veces legales al plato, conectando 187 imparables, de los cuales 26 fueron dobles, un triple y sus diez jonrones – siendo su mejor año en 1984, cuando conectó tres – produjo un total de 84 carreras, con un promedio de 0.199786 lo cual, en números cerrados, da 0.200.
Y, para hacer un “pequeño comparativo”, tuvo mejor promedio al bat que DON DRYSDALE, quien ciertamente se distinguió por dar batazos de cuatro esquinas, con 29. Pero su promedio de bateo fue de solo 0.186.
Y “extendiendo las comparaciones”, peor bateador fue SANDY KOUFAX, quien solo le dio a la bola para 0.097. Pero no olvide que en este aspecto solo estamos “fantaseando”, pues la obligación del pitcher es sacar outs, y más outs; ya, lo que haga en el plato, “es ganancia”.

Continuamos con el resto de las estadísticas que tuvo FERNANDO en su carrera: consiguió 8 bases por bolas; se sacrificó, con toques de pelota, en 93 ocasiones, y 6 más de sus sacrificios fueron de “fly”. Y los lanzadores enemigos lo hicieron “abanicar” 145 veces.
Y la “historia” de su primer jonrón, y de su último, viene a continuación: el miércoles 25 de agosto de 1982, EL TORO, haciendo por su causa, conectó el primer jonrón de su carrera, sobre los lanzamientos de STEVE MURA, de los CARDENALES de SAN LUÍS, al abrir la parte alta de la cuarta entrada, en un triunfo sobre los “pájaros rojos”, de 11 a tres.
Su décimo – y último jonrón de su carrera – sería el domingo 17 de septiembre de 1995, vistiendo el uniforme de los PADRES de SAN DIEGO. En esa ocasión el “bambinazo” lo dio contra KEVIN FOSTER, de los CACHORROS de CHICAGO, en la tercera entrada. Y ¡mire usted qué coincidencia! El triunfo que obtuvo “EL TORO” fue por el mismo score – 11 a tres – como cuando pegó su primer cuadrangular!

Además, y este es un mérito muy grande, en dos ocasiones obtuvo “El bat de plata”, en 1981 y en 1983. En el primero de esos años, VALENZUELA fue al plato en 64 veces legales y conectó 16 hits, para un promedio de .250, remolcando 7 anotaciones; y, en el segundo, .187, con 17 hits en 91 turnos, y empujando 9 carreras. Hay que hacer notar que su mejor año, en cuanto a promedio de bateo, fue en su último con los DODGERS; en esa ocasión conectó 21 incogibles en 69 veces, para un promedio de .304.
¿CUÁNTOS PITCHERS VERSÁTILES HA HABIDO? No muchos; ellos se dedican a “lo suyo”: es decir, tirar “fuego”, o “garabatos” (¡o hasta saliva!) desde el montículo, y que el manager se las arregle, para que sus compañeros en el line-up hagan el resto.
La historia nos muestra un pequeñísimo número de lanzadores versátiles, encabezados por el BAMBINO RUTH. Eso, hablando de las Ligas Mayores porque, “como usted bien sabe”, acá – en nuestro máximo circuito de verano – había pitchers que podían presumir de cubrir varias posiciones: DIHIGO, SALAZAR, CHARRASCAS RAMÍREZ, DANIEL RÍOS…hasta el ZURDO ORTIZ.

Y VALENZUELA, la verdad, no podría haber presumido de “versatilidad”, jugando otra posición que no era la suya. Principalmente, porque su constitución física no era adecuada para el desempeño en alguna posición al campo.
Es de suponerse que desde que llegó a YUCATÁN, en aquel histórico año de 1979, le entró “duro” a la cochinita pibil, al Papak-tsul (o “papad-tsul”), y a lo mejor también al “but”, “rellenos blancos o negros”, FERNANDO comenzó a embarnecer, y dejó de ser aquel chamaco “flaco”, que correteaba en los campos llaneros, los elevados de sus rivales jugando algún jardín, antes de decidirse por ser pitcher.
O como cuando tenía 17 años, y participó en un juego de estrellas representando a Ciudad Obregón ganando el premio del Jugador Más Valioso.
O “correteando”, también (dicho en el buen sentido de la palabra), con su amiga de la infancia  – CONCEPCIÓN MENDÍVIL – “…una joven de 18 años con quien acostumbraba salir a dar la vuelta, e hija del compadre de su “apá”, don AVELINO…” (Información del periodista EMILIO HERNÁNDEZ MUÑOZ, de León, Gto.).

Sin embargo, observando los “registros” podemos ver que en tres ocasiones jugó “posición”: en 1982 una vez en el jardín izquierdo, y otra en el jardín derecho, en la cual tuvo una oportunidad, “cazando” un elevado; y una vez más cuando aquel histórico juego que se fue a 22 entradas, contra los ASTROS, el 3 de junio de 1989, cuando fue enviado por LASORDA a cubrir la primera base, allá por la entrada número 21, y completó dos outs.
¿QUÉ SUCEDIÓ, DESPUÉS DEL RETIRO? No tenemos mucho que decir al respecto; pero “suponemos” – tomando de un informativo – que “…se fue a LOS ÁNGELES, donde tiene su hogar, al lado de su esposa LINDA BURGOS, y de sus hijos(as), entre ellos FERNANDO Jr”. Reproducimos: “…Tomó el avión que lo conduciría a casa; todo había concluido. Mirando tras la ventana hacia la inmensidad de los cielos recordaba aquel primer equipo con el que jugó; todos ya se habían retirado…”.

En realidad, no podemos (y mucho menos nos atrevemos) decir nada de esta situación, en cuanto a que si “FERNANDO se quedó en casa, viendo pasar el tiempo, junto con su familia”; atendiendo algunos negocios; y “esperando, a ver qué pasaba”.
Por ese lado, había quedado cerrado un capítulo muy destacado para el beisbol mexicano, su afición; y, en particular para FERNANDO VALENZUELA. Un “capítulo” que había abarcado desde aquel histórico lunes 15 de septiembre de 1980 – cuando hizo su debut, entrando como relevista contra los BRAVOS de ATLANTA – hasta aquel “malhadado” martes 14 de julio de 1997, ante los ROJOS de CINCINNATI.
Pero, teniendo aún posibilidades – y facultades – para poder jugar de nuevo en nuestro máximo circuito de verano, desconocemos por completo si haya recibido ofertas de algunos equipos; pero, en caso de haber sido así, suponemos que las rechazó todas.
¿POR QUÉ NO HEMOS HABLADO DE SUS CAMPAÑAS EN LA LIGA DE LA COSTA? En verdad – y lo sentimos mucho – no pudimos recopilar mucha información, cuando hace exactamente diez años me dio por enfocar “este asunto”; y no he podido encontrarla, ahora que estoy repitiendo el proceso. Por faltas de ganas no ha quedado.
Pero, si, tengo por entendido que jugaba esporádicamente – digamos: “todavía”, en aquellos tiempos – en esa Liga, defendiendo – primero – la franela de los NARANJEROS de HERMOSILLO; y, luego, la del “ÁGULAS” de MEXICALI.

“Algo” pude rescatar, por el camino. Y esta es una información, concreta (pero lo que indica, definitivamente, que andamos bastante “atrasados” en este aspecto). He aquí el detalle: el 23 de noviembre de 1999 me enteré que tomando en cuenta la temporada 1998/99 VALENZUELA TENÍA una marca de 30 ganados con 22 perdidos, y un promedio en carreras limpias de 2.60.
En una página más de Internet (al cual tengo que recurrir más o menos frecuentemente) encuentro un artículo fechado el 2 de noviembre del año pasado, escrito por una dama: MARIANA MORENO. En él dice: “¿CÓMO FUE LA CARRERA DE FERNANDO VALENZUELA EN LA LIGA MEXICANA DEL PACÍFICO?
De ahí tomamos lo siguiente: “…Cuando se retiró de MLB… regresó a la Liga Mexicana del Pacífico. Llegó a lanzar con los Naranjeros de Hermosillo en 2001 pero decidió parar. En 2004 quiso regresar y Águilas de Mexicali lo firmó con 44 años de edad. Pregunta de nuevo MARIANA:
“¿QUÉ NÚMEROS DEJÓ CON MEXICALI? En dos temporadas tuvo balance de 6-3 en 14 apariciones (12 aperturas), con efectividad de 5.72 y apenas 25 rivales abanicados, según los números que aparecen en Baseball Reference”.
Y MARIANA hace otra pregunta (y da la respuesta) de manera muy breve: “¿CUÁNDO FUE EL ÚLTIMO JUEGO DE FERNANDO en LMP? El 20 de diciembre de 2006 fue el lanzador abridor en el último encuentro de su carrera profesional.
NOTA: Logré entrar a una de las páginas de “BASEBALL REFERENCE”, y esto lo poco que pude encontrar: “…En la LMP en 2005, se fue de 4-2, con una efectividad de 4.31. Un año después estaba con las ÁGUILAS de MEXICALI…y uno de sus compañeros era su hijo, FERNANDO Jr…”. Y, hasta ahí; ¡párele de contar!”.
COMENZARON LAS ESPECULACIONES. Lo que sí, desde que VALENZUELA anunció su retiro del beisbol de Grandes Ligas, entre muchos de los periodistas mexicanos comenzaron las especulaciones, en el sentido de que “tenía mucha oportunidad para ingresar al SALÓN de la FAMA, de COOPERSTOWN, una vez que hubiesen pasado – como en “casi todos los casos” – los cinco años reglamentarios, desde su retiro”.
La elección correspondiente sería, entonces, para el 2003. Muchas especulaciones se manejaron al respecto (sobre todo, en el ámbito nacional). Pero, todo esto – con la intención de que esta entrega no sea tan extensa – lo veremos en nuestro próximo.