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ESTRELLAS DEL BÉISBOL
RELATOS BEISBOLEROS 5
Por Héctor Barrios Fernández

Ante y después.
Vueltas que da la vida.
Quién iba a pensar que unos años después se convertiría en uno de los mejores en la historia del béisbol mexicano.
Junto con Bobby Darwin poseedor de la marca de cuadrangulares en una temporada en la Liga Mexicana del Pacífico con 27 y dueño del mejor porcentaje de fildeo para un primera base en la LMB entre otros récords.
El gran Ronaldo “Ronnie” Camacho.

Cal Ripken Jr., es hasta la fecha el único Oriol de Baltimore que ha ganado dos veces el nombramiento de Jugador más Valioso de una temporada.
En 1983 el parador en corto de 22 años de edad lideró la Liga Americana en seis categorías, incluyendo juegos jugados con 162, carreras 121, hits 211 y hits dobles con 47.
Los Orioles ganaron la Serie Mundial ese año batiendo a los Filis de Filadelfia en cinco juegos.
En 1991, Ripken conectó 34 cuadrangulares, 114 carreras impulsadas y .566 de slugging, suficiente para ganar el nombramiento por segunda vez.
Fue electo al Salón de la Fama en el 2007.

Nolan Ryan y Don Sutton son dos lanzadores que pertenecen al Salón de la Fama del Béisbol en Grandes Ligas, cada uno ganó 324 juegos, entre los dos suman 50 años de carrera, además ganaron 20 o más juegos en una temporada en tres ocasiones.
Sin embargo a pesar de ser los lanzadores que más victorias han obtenido después de la segunda guerra mundial, nunca lideraron su respectiva liga en juegos ganados.

Entre los lanzadores de mayor edad que ganaron más de 300 juegos, que pertenecen al Salón de la Fama y ganaron el trofeo Cy Young se encuentra Gaylord Perry quien en el otoño de 1978 a los 40 años de edad ganó dicha distinción con un récord de 21-6 y 2.73 lanzando para los Padres de San Diego.

Los Dodgers de Los Angeles tenían una poderosa arma para usarla en el primer juego de la Serie Mundial de 1965.
Esa arma poderosa era el brazo zurdo de Sandy Koufax.
Sandy había tenido una de las mejores temporadas en su brillante carrera con 26 ganados 8 derrotas y 2.04 en carreras limpias.
Además lanzó su cuarto juego sin hit ni carrera en los últimos cuatro años, pero no fue un sin hit ni carrera común, sino que fue un juego perfecto.
Si Koufax lanzaba en el primer juego, tendría gran oportunidad de lanzar en tres juegos en una potencial serie de siete partidos.
Pero había un problema.
El juego uno se programó para desarrollarse en día del Yom Kippur que es el día más sagrado del año judío.
Después de un largo período de discusiones, Koufax decidió no lanzar ese día.
Don Drysdale subió al montículo por el equipo angelino y los Mellizos ganaron con lanzamientos de Mudcat Grant.
Koufax estuvo listo para lanzar en el juego dos pero contrario a lo esperado, cargó con la derrota cuando los Dodgers cayeron 5-1 ante los envíos de Jim Kaat y con ello Minnesota se ponía arriba en la serie 2 juegos a 0.
Los Dodgers ganaron los juegos 3, 4 y 5 con el pitcheo de Claude Osteen, Don Drysdale y el mismo Koufax.
Esta victoria de Sandy fue una blanqueada de solamente cuatro hits.
Con dos días de descanso el zurdo lanzó otra blanqueada en el último y decisivo juego siete, permitiendo tres hits mientras ponchaba a 10 Mellizos.
Fue una de las máximas demostraciones de pitcheo en la década de los 60s.
El lanzador antagonista en los tres juegos lanzados por Sandy Koufax fue el no menos espectacular Jim Kaat.

Lo dicho y visto tantas veces en muchas partes incluyendo el béisbol.
Cómo cambian los tiempos.
Durante un juego en el mes de septiembre de 1953, un fotógrafo sorprendió a Mickey Mantle haciendo una gran bomba con su goma de mascar.
El manejador Casey Stengel castigó a Mantle por tal acción.
En una temporada de la década de los 70s, las Grandes Ligas organizarían un concurso que consistía nada menos en hacer bombas con gomas de mascar.
Este concurso patrocinado por una famosa compañía chiclera.

Siguiendo el ejemplo de San Luis y Boston, Filadelfia se convirtió en una ciudad de un solo equipo de Grandes Ligas cuando los Atléticos se mudaron a Kansas City después de la temporada de 1954.
Los Cafés de San Luis se convirtieron en Orioles y Los Bravos de Boston siguieron conservando su nombre de batalla cuando mudaron a Milwaukee.
El hombre de negocios Arnold Johnson compró a los Atléticos por 3.5 millones de dólares a la familia Mack.
Espero sus amables comentarios en: info@beisboldelosbarrios.com