RAYMUNDO “RAY” TORRES RUIZ

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ESTRELLAS DEL BÉISBOL
RAYMUNDO “RAY” TORRES RUIZ
Por Héctor Barrios Fernández

Raymundo “Ray” Torres Ruiz, no se irá del todo, porque nos dejó su recuerdo y mientras éste siga presente en nosotros, algo de “Ray” permanecerá aquí también.
En el ámbito del béisbol, Ray no fue el jugador de los grandes récords, pero su entrega y profesionalismo, le hizo crear un estilo de juego propio que le permitía robar una base, dar un toque de sorpresa o bien de sacrificio para avanzar a su compañero, conectar un hit de cualquier calibre, sencillo, doble, triple y si se ocupaba, por qué no, un cuadrangular.
Al campo, las jugadas difíciles, las realizaba de tal manera que parecieran de simple rutina, la atrapada corriendo hacia su costado a todo lo que daba su capacidad, hacia enfrente, para terminar con un clavado de cabeza sembrado en el terreno, levantarse como si nada y sacar al final la pelota de su guante o bien corriendo de espaldas a home y en la mera barda, de último instante con un salto espectacular quedarse con la pelota como premio áureo a su esfuerzo y después brindársela al aficionado de su equipo.
Ese fue Raymundo Torres Ruiz, nacido el 12 de abril de 1958 en San José de Moradillas, Son., México, muy cerca de Hermosillo.
Modesto, respetuoso con sus compañeros y sobre todo con los aficionados, consciente de que son ellos los que sostienen el espectáculo.
En la difícil y competida Liga Mexicana del Pacífico, inició una carrera de 17 años, en 1978-79 hasta su culminación en 1994-95.
A su retiro en el departamento de slugging llegó a ocupar los primeros lugares, participó en 1,077 juegos, con 3,553 veces al bat, conectó 857 hits, de los cuales 125 fueron dobles, 26 triples, 124 jonrones que le permitieron alcanzar 1,406 bases.

En carreras anotadas, con 441, por arriba de verdaderas estrellas como lo fueron Francisco Estrada, Kiko Castro, Juan Fco. Rodríguez, Juan Carlos Canizalez, Jesús Sommers, etc., en hits conectados, ocupó el lugar 30 con los ya citados 857.
En 1979-80 jugando para “Naranjeros”, conectó 8 triples, buenos para imponer récord en ese departamento, marca que después igualaron Welington Dotel y Leo Heras.
Al conectar 26 hits de tres bases en su carrera, compartió el quinto lugar de todos los tiempos con figuras como Marco Antonio Manzo y Daniel Fernández, en cuadrangulares, conectó 124 batazos de ese calibre, en el departamento de carreras producidas, uno de los más importantes en el béisbol, si no el que más, con 465 en su brillante carrera, arriba de verdaderos íconos de nuestro béisbol como, “Canelo” Canizalez, Jesús Sommers y Carlos “Bobby” Treviño.
Su espíritu de  responsabilidad y profesionalismo, lo llevaron a ocupar el lugar 17 entre los jugadores con más juegos jugados en esta liga con 1,077, arriba de verdaderos “caballos” como Lalo Jiménez, Alonso Téllez, Roberto Méndez, Sergio Robles, Cornelio García, etc.
El 1 de diciembre de 1988, jugando para los “Tomateros” de Culiacán, en el estadio “Teodoro Mariscal”, conectó dos hits dobles en la segunda entrada, lo cual constituye un récord que comparte con Aurelio Rodríguez, Chris Álvarez y Manuel Cazarín.
Durante el juego del 28 de noviembre de 1982, jugando para “Naranjeros” y de visita en el estadio Ángel Flores de Culiacán, recibió 3 bases por bolas intencionales, para otro récord que comparte con Jorge Orta, Rommel Canada y Anthony Seratelli.
En invierno se estafó 74 bases y jugó principalmente para los “Naranjeros” de  Hermosillo, también para Guaymas, Navojoa, Culiacán y Guasave.
En el béisbol hermosillense merece capítulo aparte al lado de Héctor Espino, Sergio Robles, Miguel Flores, José Luis Sandoval, Celerino Sánchez, Vinicio Castilla, Benjamín Reyes, Claudio Solano, Miguel Sotelo, Francisco Barrios, Alfredo Ortiz y tantos estrellas que han pasado por esa beisbolera ciudad.

En el béisbol de verano, participó durante 20 temporadas entre 1977 y 1998, inició en Durango, después pasaría a Diablos Rojos, Yucatán, Monterrey, Campeche y terminaría con Yucatán en sus últimas cinco campañas para acumular once y fracción con este equipo.
Participó en 1,930 juegos, 6,350 veces al bat, 1,700 hits, 1,086 carreras anotadas, 283 hits dobles, 42 triples, 311 cuadrangulares llegando a ocupar el octavo lugar en esta categoría en todos los tiempos, 13 de ellos fueron con las bases llenas, para ser el jugador que más “grand slams” ha conectado en la  Liga Mexicana de Verano, tuvo 1,146 carreras producidas, las veces que se sacrificó, se dividen en 49 toques y 91 elevados, recibió 1,018 bases por bolas, de las cuales 67 fueron intencionales, lo poncharon en 1,303 ocasiones, robó 112 bases y tuvo un promedio de slugging de .472.
Integrante del Salón de la Fama del Béisbol Mexicano desde el año de 2006, lo cual lo convierte en inmortal de este deporte, con su nombre escrito al lado de los grandes del béisbol, selecto grupo al que sin duda alguna por mérito propio, pertenece. Ray Torres incursionó en la pelota de Estados Unidos, en 1979 participó en 10 juegos con Knoxville, conectó 14 hits, 4 carreras producidas, .412 de porcentaje.

Ese año pasó a Iowa en donde jugó sólo 4 juegos y en 14 veces al bat conectó 5 hits, para un promedio de .357, todo esto a los 21 años de edad, en 1980 comenzó con Glens Falls en donde jugó 40 juegos, 134 veces al bat, 32 hits, para un .239 de porcentaje, de ahí de nuevo a Iowa y en 26 juegos, 98 veces al bat y 24 hits, .245 de porcentaje.
Volvió para 1981 jugando para Appleton y Glens Falls, promediando .306 y .111 respectivamente.
Se despide de ligas menores de Estados Unidos jugando para Edmonton en 1982, en 10 juegos le sonó para .233, siempre en sucursales de los Medias Blancas de Chicago.
Los totales, en 207 juegos, 697 veces al bat, 197 hits, 99 carreras impulsadas y .283 de promedio de bateo.
Raymundo “Ray” Torres Ruiz, fallecido en lamentable accidente automovilístico el 27 de octubre del 2012.
Descase en paz.                          
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