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ESTRELLAS DEL BÉISBOL
NOVATOS DEL AÑO EN 1960
Por Héctor Barrios Fernández

Bucky Dent tuvo gran “ojo” en la caja de bateo, además de ser un gran fildeador en su posición de campo corto, pero es muy probable que sea mejor conocido como el jugador que conectó el cuadrangular de tres carreras en 1978 jugando para los Yankees de New York contra los Medias Rojas de Boston para conseguir el título divisional de ese año. También recordado en México por haber jugado para los Naranjeros de Hermosillo. Bucky una vez dijo que él deseaba que los aficionados lo recordaran por la buena carrera que tuvo, “por alguna razón, se recuerda más ese cuadrangular,” dijo Dent con cierta nostalgia. Tal vez Ron Hasen, el novato del año en 1960 por la Liga Americana, tiene algunos amigos que recuerdan que él es uno de poquísimos jugadores que han hecho un triple play sin asistencia, quince en total hasta el día de hoy, (al menos en el beis moderno,) ocho de ellos paradores en corto, el más reciente Troy Tolowitski el 26 de abril del 2007, Rockies contra Bravos de Atlanta cuando atrapó de aire, pisó segunda y tocó al corredor que venía desde primera, ¡fácil! ¡eh! Tanto Hansen como Dent fueron paradores en corto que sus promedios al bat anduvieron rondando los .240, aunque Hansen se las averiguaba para conectar más cuadrangulares, conectó 20 en 1964 con los Medias Blancas de Chicago y 22 en la temporada que ganó el título de novato del año, con los Orioles. En su año de novato, no solamente Hansen consiguió el mayor número de cuadrangulares en su carrera, sino que también lo hizo en triples con 5 y carreras producidas con 86. Además anotó 72 carreras, su segunda mejor cifra, y bateó para .255. Aunque Hansen cometió 29 errores en el campo corto de Baltimore, lideró en esa posición en outs, y fue segundo en asistencias y dobles matanzas, sólo atrás de Luis Aparicio de los Medias Blancas, por cierto que Hansen y Aparicio se vieron involucrados en un cambio entre sus equipos Orioles y Medias Blancas en 1963, a partir de ese año, Hansen lideró o estuvo muy cerca de hacerlo en la mayoría de las categorías defensivas de su posición. Hansen causó mucho alboroto en julio de 1968 cuando jugando para los Senadores de Washington, realizó un triple play contra los Indios de Cleveland, fue enviado de regreso a los Medias Blancas cuatro días más tarde. Mientras Ron Hansen, novato del año en la temporada de 1960 en la Liga Americana, anduvo en los “claro-oscuros” en su carrera beisbolística, en la Liga Nacional Frank Howard de los Dodgers de Los Angeles, con una estatura impresionante de más de 2 metros (2.01 m) y 115 kg de peso, obtenía el reconocimiento de novato del año en el viejo circuito. Cuando me enteré por primera vez de la existencia de Frank, ya era Senador de Washington y después lo vi más de cerca como manejador del equipo de San Diego. En sus días en el campo, cuando las cámaras de televisión se detenían en Frank Howard, los cronistas solían llamarle “Big Frank Howard,” como si Frank fuera su segundo nombre. La verdad que su “carrocería” impresionaba y aún impresiona, como la de Harmon Killebrew y Boog Powell. Frank es recordado como uno de los bateadores más temibles a principios de los 1960s hasta principios de los 1970s. Howard fue el clásico bateador de bola larga, todo o nada. Se ponchaba aproximadamente del doble de veces en relación a las bases por bolas que recibía, aunque en 1972 fue líder en la Liga Americana con 132 bases por bolas recibidas, conectó un buen número de hits dobles, ya que en cinco temporadas pegó 20 o más y a pesar de su físico, en 1962 y 1965 se las arregló para conectar 6 triples. Con seguridad ese tipo de hits fueron más emocionantes que sus cuadrangulares (382). Pero es por sus larguísimos cuadrangulares por los que Frank Howard es mejor recordado. Lideró a la liga con 44 para la calle en 1968 y de nuevo en 1970, el mismo año en que lideró en carreras producidas con 126. Sus 44 cuadrangulares en 1968 fueron realmente una cantidad impresionante, si consideramos que ese fue el “año de los lanzadores,” por el dominio que tuvieron en general sobre los bateadores. Recordemos que Denny McLain de los Tigres de Detroit ganó 31 juegos y Bob Gibson tuvo 1.12 en carreras limpias admitidas con 13 blanqueadas. Al día de hoy, en general, el cuerpo de lanzadores de un equipo a duras penas consigue un número muy bajo de cierres. Tan dominaron los lanzadores que ese año de 1968, Carl Yastrzemski de los Medias Rojas, fue el líder en bateo en la Liga Americana con promedio de .301. A Frank Howard le fue de maravilla en su temporada de novato con los Dodgers de Los Angeles. Bateó para promedio de .268 con 23 cuadrangulares y 77 carreras producidas en 117 juegos. También anotó 54 carreras. Fue nombrado novato del año en 1960, ganándole la carrera a su compañero de equipo Tommy Davis y al tercera base de los Cachorros de Chicago Ron Santo. Frank jugó solamente en una Serie Mundial, en la que los Dodgers barrieron a los Yankees 4 juegos a 0, eso fue en 1963, bateó 3 hits en 10 veces, entre ellos un monstruoso cuadrangular en el estadio de los Dodgers. Le apodaban “Hondo,” también “el Monumento a Washington” o “el Castigador del Capitolio,” pero “Big Frank Howard” fue el apodo más común en él, jugó por 16 años en la Ligas Mayores y después fue “coach” y manejador.
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